Lubricán, define el momento en el que se produce la transición del día a la noche y de la noche al día; un instante de cambio que señala la naturaleza inquieta de toda imagen, su transformación nerviosa. En palabras de la propia artista: “Literalmente, es que se te haga de noche fuera de casa, en la calle”.
La exposición se detiene sobretodo en el rasgo polifónico de la obra de la artista, observando la manera en que asigna y genera fricciones entre voces. A menudo mensajes o textos del pasado atraviesan cuerpos en el presente dando lugar a extrañamiento, conflicto o violencia
El artista retrata el mundo animal en los contextos más diversos: desde el hábitat natural hasta el museo de Historia Natural, desde el zoo a la ciudad, en lugares remotos o en situaciones u objetos banales
Little Animals, Ash Trays reúne una serie de piezas que son esenciales en el imaginario de los artistas, cuya práctica se caracteriza en lo formal en el empleo de técnicas como el collage, el ready-made – objeto encontrado-, y en lo discursivo se adentra en la ficción, en la antropología crítica y las antologías no occidentales.
El núcleo central de la exposición presenta las reconstrucciones a escala 1:1 de tres de las chekas psicotécnicas de Barcelona y Valencia. A su alrededor habrá todo tipo de trabajos documentales, fotografías, filmes, piezas de arte, fondo bibliográfico y diseños arquitectónicos.
Querer parecer noche acoge diferentes formas de producción artística en Madrid, creaciones que se debaten entre la nostalgia histórica de la que son herederas y el momento histriónico actual, con sus distintas sensibilidades y maneras de hacer, y donde la idea de lo local se construye a caballo entre quienes lo habitan y quienes están de paso.
Entre las intervenciones artísticas derivadas de los ejercicios de acupuntura arquitectónica puestos en marcha en el otoño de 2016, Dora García realiza una exposición que se formaliza como una nueva señalética, una intervención permanente que afecta a todos los espacios del centro.
El Barro de la Revolución comprende algunos de los trabajos realizados por Paloma Polo a partir de su prolongada estancia, o más bien de su «inmersión vital y política», en Filipinas desde el año 2013. Es precisamente el último de estos trabajos, una película de aproximadamente 2 h y 35 min de duración, el que da título y sirve de eje central para la exposición.
The Woolworths Choir of 1979 es un celebrado trabajo de vídeo que se compone de tres partes que aglutinan cuerpos de material de archivo en una composición aparentemente disonante: fotografías de coros de iglesia del gótico británico, fragmentos de vídeos tomados de internet que muestran coristas de actuaciones de música pop y metraje de las noticias televisivas de un incendio en el departamento de muebles de los grandes almacenes Woolworths en Manchester en 1979, en el que perdieron la vida diez empleados.
La exposición de Charlotte Moth, comisariada por Caroline Hancock, forma parte de las invitaciones que el CA2M Centro de Arte Dos de Mayo hace regularmente a artistas para que trabajen sobre sus colecciones. La artista ha trabajado en un proceso asociativo que responde a la materialidad del edificio y de su espacio expositivo centrado en tres de las obras de las colecciones y en sus posibles interconexiones: dos partes de un fondo de escena pintado por Leonor Fini en los años 50 encargado por Antonio el Bailarín, el gouache Sin título de 1989 de Sol LeWitt y la serie Deutsche Museen [Museos alemanes], investigación fotográfica sobre los museos de arte contemporáneo en Alemania realizada por Elmgreen & Dragset en 2005.